Estamos en un punto crítico. El cambio climático nos está golpeando fuerte y las ciudades, en las que la mayoría de nosotros vivimos, son un elemento clave. No podemos ignorar el potencial -y los peligros- de las urbes para adaptarse y luchar contra el cambio climático. Los riesgos son mayores en los asentamientos que crecen descontroladamente. Como un Lego desquiciado.
Y así, de repente, se desataron las megaestructuras. «Megastructure» es un rompecabezas en vivo, un dueto de danza performática donde las piezas se desarman, se buscan, se prueban y se reinventan sin parar. Emergen y desaparecen. Se erigen y se desmantelan. No hay respiro. Ni aire. Sarah Baltzinger e Isaiah Wilson, nos proponen una experiencia sensorial en la que los movimientos intuitivos y los cuerpos se distorsionan y abren un lugar extraño pero reconocible, que despierta nuestra curiosidad y al mismo tiempo nuestro temor. ¿Qué espera la gente de una performance? ¡Ay! ¿Qué es esencial para crear algo real? Un territorio donde el significado se debate y el imaginario se desfigura. Sin música ni distracciones, «Megastructure» te atrapa y te sumerge por completo.