8 compañías de toda España participan en el Certamen Coreográfico 10 Sentidos
- Ocho compañías se darán cita en Espacio Inestable, sede que acogerá la competición a lo largo de la jornada de mañana jueves 20 de mayo
- Como excepción y para garantizar la asistencia de las piezas a competición, este año se acota la selección a compañías de territorio nacional
- Manuel Rodríguez será el artista invitado con ‘Mandala’
El Certamen Coreográfico 10 Sentidos, referente del talento emergente, reunirá mañana jueves 20 de mayo en el mismo escenario al panorama dancístico más heterogéneo venido de todos los rincones de nuestra geografía. Espacio Inestable es la sede que acoge la competición en un año en el que, como excepción y para garantizar la asistencia de las piezas a competición, se acota la selección a compañías de territorio nacional.
Las ocho vibrantes propuestas finalistas que competirán en esta edición son ‘VAMOS’ de Angel Garcés, sobre rituales y manías que adoptamos de manera inconsciente; la propuesta coreográfica ‘Quiral’, de La Basal, que reflexiona sobre las distintas identidades que conviven dentro un mismo ser; ‘Invitación matutina de la perturbación’ de Marina Fueyo, donde adaptarse a un sistema defectuoso será la única condición; ‘FI DU’, con la que Elena e Iván se preguntan cuáles son nuestras fronteras y si la respuesta pasa por comunicarnos a través del cuerpo; Cía. Silvia Batet y su lugar de transformación y cruce de fronteras llamado ‘Oblivion’; la danza del olvido que propone Iron Skulls Co en ‘Un último recuerdo’; el ‘found footage’ coreográfico, ‘The Lesson’, de laSADCUM, para repensar nuestros comportamientos en la era post-internet; y ‘Mapa’, de Colectivo Glovo, sobre cuerpos pensados como líneas continuas que buscan ser naturaleza.
Artistas locales y residentes nacionales cuyas propuestas han sido seleccionadas por su originalidad en la búsqueda de códigos de movimiento innovadores, por promover la investigación coreográfica, y por su relación con el lema ‘Fronteras’, que este año marca la décima edición de 10 Sentidos con una reflexión alrededor de límites y barreras que imperan en nuestro orden mundial.
El jurado encargado de otorgar el premio, compuesto por una dotación económica de 2.000 euros y una pieza de la firma Lladró, está formado por Roberto Fratini, dramaturgo y docente en Institut del Teatre; Juan Pablo Soler, director del Teatro Circo Murcia; Teresa Lasheras, dirección de artes escénicas y música Museo Universidad de Navarra; María José Mora, directora artística de Dansa València; y Guillermo Arazo, director artístico Espai la Granja. Espacio Inestable, por su parte, concederá el premio MIGRATS, que seleccionará una de las piezas para participar dentro de la programación de MIGRATS 2021.
Manuel Rodríguez, artista invitado con ‘Mandala’
Durante la deliberación del jurado, y como viene siendo habitual en este certamen, una compañía es invitada a actuar como previa a conocer la propuesta ganadora. Manuel Rodríguez, reconocido coreógrafo e intérprete en la escena contemporánea nacional, llevará a los escenarios de la Inestable su pieza ‘Mandala’. El primer acto de su tríptico ENTERTAINMENT con el que el artista presenta un cuerpo en pausa, fuera del tiempo, suspendido y en sí mismo que sugiere la posibilidad de que el estado contemplativo quizá no se distancie tanto de su simbólico antagonista, el entretenimiento. La estrecha frontera entre ambas maneras de percibir sería el lugar donde se desarrolla este proyecto, un espacio de potencias, ambigüedad y paradojas que funciona como detonante y punto de inflexión. En ‘Mandala’, el trabajo de Manuel Rodríguez genera un cuerpo indefinible, indomable, fragmentado en innumerables partes. Un ente limitado que, sin embargo, contiene todas las identidades.
Para completar su paso por 10 Sentidos, Manuel Rodríguez impartirá una masterclass el viernes 21 de mayo en Espacio La Granja dirigida al concepto de contemplación y observación con la intención de generar una perspectiva más profunda de lo que el cuerpo significa para cada uno de nosotros. Este proceso se lleva a cabo a través de sesiones de improvisación guiadas, “una interfaz” donde se trabaja con pautas y herramientas que
funcionan como motores de activación física. Las prácticas de disociación toman protagonismo como ejercicio para alcanzar una mayor consciencia y percepción del cuerpo en el espacio, permiten profundizar en su funcionamiento de una manera más consciente, sutil y arquitectónica.